La temporada 2025 de los Toronto Blue Jays comenzó con un golpe de realidad en el Rogers Centre. Ante 47,000 aficionados que acudieron con la ilusión de ver un arranque prometedor, los Azulejos sufrieron una contundente derrota 12-2 frente a unos Orioles de Baltimore que desplegaron una ofensiva arrolladora desde el primer lanzamiento.
Aunque el ambiente previo al partido fue festivo, con presentaciones de jugadores y un emotivo homenaje a viejas glorias del club, la energía se disipó rápidamente cuando la batería de Baltimore tomó el control del marcador desde el primer inning.
Un arranque cuesta arriba para Berríos
José Berríos, el abridor asignado para el juego inaugural, se enfrentó a una alineación visitante decidida a dejar huella. El derecho puertorriqueño permitió múltiples imparables en las primeras entradas, incluyendo dos jonrones que encendieron las alarmas en el dugout local.
“Ellos aprovecharon cada error y no pudimos ejecutar nuestros lanzamientos como queríamos”, declaró Berríos después del encuentro visiblemente frustrado. “Es apenas el primer juego, pero hay que ajustar rápido”.
El daño inicial fue suficiente para que Toronto jugara gran parte del partido en desventaja amplia. Baltimore acumuló seis cuadrangulares en total, demostrando que su poder ofensivo no es casualidad.
Protagonistas: Rutschman y O’Neill hacen historia
Adley Rutschman, receptor estrella de los Orioles, fue el gran protagonista con dos jonrones. El segundo, de 436 pies, aterrizó en lo profundo del jardín derecho y dejó a la afición local en silencio. Su capacidad de producir carreras en momentos clave volvió a marcar la diferencia.
A su lado, Tyler O’Neill sumó un logro extraordinario: conectó su sexto jonrón consecutivo en juegos inaugurales a lo largo de su carrera, una marca sin precedentes en la historia de Grandes Ligas. Cada vez que se presenta en un Opening Day, el jardinero parece garantizar espectáculo.
Mullins y el festival de cuadrangulares
Cedric Mullins se encargó de añadir más presión a la rotación local con sus propios batazos de largo alcance. En total, los Orioles completaron seis jonrones, castigando cualquier lanzamiento que quedara a la zona alta o centrada.
La ofensiva visitante no sólo se basó en la fuerza; también supo trabajar los turnos al bate, forzando a Berríos y luego al bullpen azul a lanzar más de lo esperado. En total, los Azulejos utilizaron cinco relevistas para intentar detener la hemorragia, pero el daño ya estaba hecho.
Guerrero Jr. y la resistencia ofensiva local
Por parte de Toronto, Vladimir Guerrero Jr. fue uno de los pocos que mostró algo de resistencia, conectando un doble y impulsando una carrera. Sin embargo, la ofensiva en conjunto no logró encontrar ritmo frente a la combinación de lanzamientos de Kyle Bradish, abridor de Baltimore, y el bullpen visitante.
La producción ofensiva quedó limitada a dos carreras, insuficientes para contrarrestar la avalancha de Baltimore. “No fue nuestro día, pero esto no define nuestra temporada”, aseguró Guerrero Jr. al finalizar el duelo. “Tenemos talento para competir”.
Reflexiones del manager y expectativas
El manager John Schneider reconoció que el equipo deberá trabajar en la ejecución y la defensa:
“Baltimore nos mostró por qué son considerados uno de los conjuntos más peligrosos en la conferencia. No podemos darles oportunidades, porque las aprovecharán. Es apenas un juego, y ahora debemos enfocarnos en ajustar y responder mañana”, comentó.
Los Azulejos saben que una temporada de 162 partidos ofrece margen para recuperarse, pero también entienden que cada encuentro cuenta en la batalla por un lugar en los playoffs, particularmente en una división tan competitiva como la Este de la Liga Americana.
Contexto y antecedentes
Toronto venía de una temporada 2024 marcada por altibajos, en la que lograron una plaza de comodín pero fueron eliminados en la primera ronda. La directiva reforzó ciertas áreas durante el invierno, apostando por la estabilidad en la rotación y la juventud en el cuadro. Sin embargo, este inicio deja claro que los ajustes no se verán de inmediato.
Baltimore, por su parte, continúa consolidándose como una potencia emergente, con un núcleo joven y bien desarrollado que no teme asumir protagonismo. Con Rutschman, O’Neill y Mullins como líderes ofensivos, los Orioles son considerados serios candidatos para pelear el título divisional.
Próximos pasos
Los Azulejos tendrán oportunidad de revancha en el segundo juego de la serie mañana por la noche, nuevamente en el Rogers Centre. Schneider aún no ha confirmado el abridor, aunque se espera que Chris Bassitt tome la pelota.
Los aficionados locales confían en que el equipo mostrará una cara distinta, con mayor disciplina en el plato y menos errores defensivos. El desafío es claro: frenar la ofensiva de Baltimore y demostrar que esta derrota es solo un tropiezo inicial.
Conclusión:
El Opening Day 2025 dejó a Toronto con más preguntas que respuestas, pero también con la motivación de corregir el rumbo rápidamente. La derrota por 12-2 frente a los Orioles es un recordatorio de que, en el béisbol, incluso las temporadas más prometedoras pueden empezar con dificultades. Los Azulejos tendrán que apoyarse en su talento y experiencia para transformar este inicio en un impulso hacia mejores resultados.



