La ecologista Berta Cáceres, conocida activista de Honduras, quien fue asesinada este jueves en la madrugada en La Esperanza, en el oeste del país, ha sido una incanzable luchadora por los derechos humanos y el medio ambiente.
La madre de Cáceres reveló que la policía dice que se trató de un intento de robo.”Pero todos sabemos que fue por su lucha”, agregó en declaraciones recogidas por la agencia AFP.
En abril de 2015, esa lucha le valió a Berta Cáceres el Premio Medioambiental Goldman, el máximo reconocimiento mundial para activistas de medio ambiente.
Activismo de Cáceres derrumbó a una trasnacional y al Banco Mundial
Berta Cáceres organizó al pueblo lenca, la mayor etnia indígena de Honduras, en su lucha contra la represa de Agua Zarca. La construcción estaba prevista en el noroeste del país en el Río Gualcarque, sagrado para las comunidades indígenas y vital para su supervivencia.
La campaña emprendida por Cáceres logró que el constructor más grande de represas a nivel mundial, la compañía de propiedad estatal china Sinohydro, retirara su participación en el proyecto hidroeléctrico. La Corporación Financiera Internacional, institución del Banco Mundial que invierte en el sector privado, también abandonó la iniciativa.
“Pueblo milenario”
La defensa de la naturaleza fue parte del ADN de Cáceres y está enraizada en su identidad lenca.
De acuerdo a una publicación de la BBC, la activista hondureña indicó en una entrevista realizada hace menos de un ano que “Actualmente somos más de 400 mil lencas. Somos un pueblo milenario en Honduras y el oriente de El Salvador”.
“Nos consideramos custodios de la naturaleza, de la tierra, y sobre todo de los ríos”, dijo Cáceres a la BBC.En la tradición lenca, en los ríos residen los espíritus femeninos y las mujeres son sus principales guardianas.
Fuente: BBC, El mostrador
Foto : El heraldo